Poesía existencialista en El Salvador

¿QUÉ ES EL EXISTENCIALISMO?

El existencialismo es una corriente filosófica que se originó en las primeras décadas del siglo XX en Europa (primero Alemania y luego en Francia) en el contexto de la primera y segunda guerra mundial. Melo (2009) define al movimiento existencialista como

“el periodo en el que se mezclan de cierta manera, la etapa de revalorización  de la vida  en las primeras décadas del siglo XX. Se trata de un momento de crisis para el hombre y los problemas que acarrean las guerras mundiales las cuales promueven a un cuestionamiento de la univocidad de la razón y del ser, en conexión  a la pugna filosófica que se desarrolló a principios de la primera década de siglo” (p.2)

            Este pensamiento filosófico consiste en encontrarle sentido a la existencia humana reflexionando en la libertad, en el tiempo, la naturaleza del hombre y la religión. Dicho de otra manera se puede decir que este pensamiento buscaba darle una explicación a la condición de vida del hombre y su reacción ante los problemas que enfrentaba.

A lo anterior se puede sumar la valoración de Mejía al decir que “las bases filosóficas del hombre parten de la idea de que la existencia precede a la esencia. En otras palabras los actos, las acciones y la reacción del hombre ante los problemas de la sociedad están antes que el hombre concretamente” (2009, p 98).Esto quiere decir que el existencialismo considera que la esencia del ser humano se forma en las interacciones sociales

A lo dicho anteriormente también podemos agregar un planteamiento interesante y es que para los existencialistas el ser humano posee libertad, pero una libertad condicionada por la misma sociedad, es decir que en el desarrollo de la esencia humana la misma sociedad impone gusto, costumbres, religión y convicciones. Lovchuk 1985 (citado en na. P. 60) afirma que “el ser humano no elige las condiciones de vida, por el contrario, lo consideran un ser arrojado al mundo, por encima de su voluntad”.

            

ENFOQUES DEL EXISTENCIALISMO

El existencialismo filosófico se divide en tres enfoques  los cuales son:

1-El Existencialismo Romántico

Esta edad del existencialismo tiene como principal representante al danés Søren Aabye Kierkegaard quién está en contra de los planteamientos del idealismo dialectico de Hegel en el cual el individuo solo podía tener un pensamiento objetivo y puro de las cosas, mientras que para Kierkegaard la existencia del ser movía a la acción creando así individualidad y subjetivismo. “Kierkegaard niega la posibilidad del pensar puro, representado y tipificado, para él, por el idealismo dialéctico de Hegel” Astrada (1949, p.350).

Esta crítica era realizada ya que para Kierkegaard el pensar puro era a nivel colectivo y para lograr trascender era necesario la existencia de cada ser, es decir las trascendencia del hombre a encontrar su destino de manera individual ya que la colectiva resultaría de la trascendencia existencial de cada individuo.

Además de lo anterior para Søren la única manera de solucionar los conflictos a los que el hombre se enfrentaban era por medio de la angustia o desesperación que estos producían ya que de esta manera el hombre podría encontrar el camino a la redención “Para Kierkegaard tanto la desesperación como la angustia son necesarias en el hombre ya que son el camino para la fe y la salvación” (Melo, 2009, p.3).

Para Kierkegaard la angustia surge en consecuencia al pecado ya que este genera sentimiento de culpabilidad por lo que deben de entregarse en las manos de Dios quién le dará un motivo por el cual pueda existir. Contrapondrá, precisamente, el modo propio de acercarse a la verdad y a la idea, diciendo con palabras de indudable prestigio; «lo que importa es entender cuál es mi destino, ver aquello que Dios quiere propiamente que yo deba hacer, hallar una verdad que sea verdad para mí, hallar la idea por la cual pueda vivir o morir» Prini (na, p.6).

2-Existencialismo Metafísico

El representante del existencialismo Metafísico es el alemán Martín Heidegger. Éste pensador buscan contestar una pregunta en la cual se base su planteamientos filosófico, esta pregunta es ¿Por qué hay entes en lugar de no haber nada?  O dicho de otra manera se busca responder al hecho de ser, acerca de su ser o de su existencia.

 Para responderla Heidegger basa su teoría a partir del término “Dasein” que según Heidegger “es la palabra clave de mi pensamiento y da lugar agraves errores de interpretación. No significa tanto para mí: heme aquí, sino —y valga la expresión—: ser el ahí y el ahí es precisamente aletheia, patencia, apertura.»(Citado en Vernaux, na, p.15). Este término lo utiliza de dos maneras, la primera es el análisis existencial de hombre para llegar al ser, mientras que la segunda hace referencia al lugar donde aparece el ser.

De lo anterior se puede agregar que para Heidegger el hombre llegará al Da-sein una vez que este reflexione en sí mismo y pueda abrirse a las posibilidades. «Aquello hacia lo cual el Desein trasciende, lo llamamos el mundo, y la trascendencia la definimos como el ser-en-el-mundo.»(Vernaux, na, p.17).

Para Martin la esencia del hombre reside en su existencia y sinónimos de esta son la preocupación, la trascendencia y la temporalidad. Cuando se refiere a la preocupación es como la persona enfrenta problemas como por ejemplo la muerte y la actitud de este ante la muerte. Si se considera que la posibilidad suprema del hombre es la muerte, se le puede definir según esta perspectiva un «ser para-la-muerte».

La trascendencia hace referencia a la posibilidad que tiene el individuo de transformar  su ambiente ya que este es quién lo crea “Así pues, en un sentido el mundo es «subjetivo», ya que forma parte del ser del hombre y le es
esencialmente relativo (Astrada. na, 17) .

Según Astrada (na, 17)  para Heidegger “No hay un tiempo en el que el hombre no haya existido.» Esto no significa que el hombre sea eterno, sino que el
tiempo empieza y termina con él, porque es su misma existencia”. Aquí reflexiona los tres momentos temporales del ser, uno en el pasado de lo que fue el ser y ya no es, la preocupación de no ser lo que será y el ultimo es el presente en lo que soy y aun no puedo transformar.

3-Existencialismo como humanismo (Ateo)

El existencialismo humanista o ateo  ha consistido en liberar el concepto del hombre de toda articulación metafísica, de toda dimensión trascendente o religiosa. El representante de esta edad del existencialismo es el  escritor y pensador francés Jean Paul Sartre.

Sartre dividirá en tres regiones del ser su teoría  “Su ontología se refugia en lo que Heidegger denominaba el plano de las «ontologías regionales»: describe tres regiones del ser: el ser en sí, el ser para sí y el ser para otro” (Vernaux, na, p.32).Estas tres regiones representaban los estados en los que puede estar el ser humano y por ende no hay cabida para una divinidad.

La primera región es la de “el ser en sí” para Sartre es la pasividad con la que se encuentre el ser, ya que, no trasciende a su transformación “el ser en sí es pura positividad, es lo que es, nada más ni nada menos” (Vernaux, na, p.33). Esto hace referencia a que el ser en sí aún no puede llegar a trascender y se mantiene inmóvil, dicho de otra manera es un ser sin conciencia.

Ante el anterior planteamiento la idea de Dios no puede caber aquí ya que el ser en sí es un ser inmutable al igual que Dios pero este no posee conciencia entonces podría verse como una blasfemia pensar que Dios es un ser inconsciente.

La segunda región es “el ser para sí”, el cual hace referencia al ser que trasciende de sí mismo pero no de una manera distante sino hacia la nada, ya que es él quien toma las decisiones de los valores y costumbres e ideales que seguirá. “El para sí es el ser que se determina por sí mismo a existir en cuanto que no puede coincidir consigo mismo” (Vernaux, na, p.34).

Si la libertad de los otros puede ser deseada, por ejemplo en la lucha social, como una condición para que sea posible la propia libertad, sin embargo, en el contacto de persona a persona, en el trato de tú a tú de la intimidad, la libertad, tal como la entiende Sartre, no puede conducirse como tal, sin intentar suprimir la libertad de los demás, y, por supuesto, sin la continua amenaza de ser a su vez sorprendida por ésta.

Entonces al rechazar la idea del ser en si se podría valorar la opción de ser para sí, pero también caería en un error ya que el ser para así anhela trascender y cambiar, entonces si hemos dicho que Dios es inmutable no puede caber en el ser para sí.

La tercera región del ser para Sartre es la región es “el ser para el otro”. En esta región Sartre especifica que cuando se emite un criterio de valor hacia otra persona, este criterio no representa el ser de la otra persona en sí, sino más bien es parte de la subjetividad de la opinión de quien la hace. Ante esto Vernaux expresa lo siguiente (na, p.33). “El otro no puede ser representado, sino solamente encontrado”.

De lo anterior también cabe añadir que Sartre decía que la única manera de que el otro revele la existencia de otra persona es por medio de la vergüenza, ya que si se actúa en razón de ser agradable a otra persona, esta podría reprobar al otro y hacer el sentir vergüenza por lo que este ser entraría en crisis o “angustia”. “Pero la vergüenza no es el sentimiento de mí mismo en cuanto solitario y secreto, su noción implica un observador extraño: siento vergüenza de mí ante alguien, siento vergüenza de mí tal como aparezco ante el otro”. (Vernaux, na, p.34).

Tampoco al tratar de encasillar a Dios en el ser para el otro podría ser congruente para la tradición cristiana y esto debido que el ser para el otro refleja un aspecto subjetivo, y si Dios es Dios quiere decir que no puede ser subjetivo en su valoración sino objetivo, también al añadir que Dios no busca la aceptación de los humanos, más bien las personas buscan la aceptación de Dios por lo que este planteamiento refuta la idea del existencialismo Romántico.

BIOGRAFÍA DE ALBERTO GUERRA TRIGUEROS

Según la revista Cultura (1963, p.75) “Alberto Guerra Trigueros nació en Rivas, Nicaragua, en 1899.” Su padre era un doctor de origen nicaragüense con conocimientos médicos superiores al medio en el que laboraba, contraería matrimonio con la salvadoreña María Teresa Trigueros y de esta unión nacerían tres hijos entre los cuales se encuentra Alberto.

Alberto G. Trigueros viajaría constantemente en su infancia de Nicaragua a El Salvador y viceversa. Al fallecer su madre se mudaría a Europa a estudiar a países como Francia, Suiza e Inglaterra. Según la revista Cultura (1963, p.75) En Suiza fue confiado a sacerdotes de la Compañía de Jesús y  su niñez y adolescencia se deslizaron lentas y tranquilas en aquella casa de maestros cuidadosos y sabios, pero huérfanas de las dulces alegría del propio hogar.

Según Sánchez (2015, párr. 2) “Durante su estancia en gran Bretaña recibió la noticia del fallecimiento de su progenitor – de nacionalidad nicaragüense – por lo que se vió forzado a  interrumpir su periplo académico europeo para regresar a Centroamérica y hacerse cargo de su herencia”. Al regresar al país en la ciudad de Santa Ana contraería matrimonio con Margot Turcios sobrina del poeta nicaragüense Rubén Darío. Después regresaría a Europa donde nacerían sus dos hijas para después, entre las cuales se encuentra la poeta Dora Guerra volver y asentarse en el país.

Por el año de 1932 Guerra Trigueros compro la empresa periodística
donde se editaba "Patria", diario ya famoso por la campaña civilizadora que en
el habla sostenido don Alberto Masferrer hasta el día de su muerte , y en compañía de Salarrué y otros escritores y periodistas, se entregó  a la tarea de señalar nuevos rumbos culturales a los salvadoreños, de despertar conciencias dormidas, de promover en cualquier forma el adelanto del pueblo salvadoreño, de poner en evidencia a los que abusando de su riqueza o poder explotaban a los menos favorecidos.

Cultura (1963, p.75) Guerra Trigueros se reunió poetas, escritores y artistas, en el año 1935, y fundaron en casa de María de Baratta y de su esposo, la asociación
cultural que se llamó "Amigos del Arte”. Esta asociación llevaría a cabo exposiciones de pintura, ciclos de conferencias culturales, dieron a conocer las nuevas obras de los escritores.

Además de ser autor de una obra destacada, jugó un papel importante como difusor de las nuevas ideas estéticas. En sus ensayos abogó por una redefinición radical del lenguaje y los temas poéticos hasta entonces muy dominados por la estética modernista. Promovió el verso libre y una poesía de tono coloquial, proclamando así una poesía "vulgar", en el sentido de redimir la cotidianidad. Estas ideas se hicieron más visibles en las generaciones posteriores (en la de Pedro Geoffroy Rivas, Oswaldo Escobar Velado o Roque Dalton), ya que sus contemporáneos elaboraron una expresión lírica siguiendo moldes más bien clásicos, aunque ya distantes del modernismo. Entre sus obras se encuentran:

Ø  Silencio (1920)

Ø  El surtidor de estrellas, 1929

Ø  Poesía versus arte: artículos y conferencias, 1942

Ø  El libro, el hombre y la cultura, 1948

Ø  Minuto de silencio, 1951

Ø  Poesía reunida (edición preparada por el escritor Miguel Huezo Mixco), 1998.

Ø  Poema póstumo, 1963

Según Sánchez (2015, párr. 1) Alberto Guerra Trigueros falleció  el 22 de Junio de 1950, víctima de una afección cardiaca.

POESÍA EXISTENCIALISTA EN EL SALVADOR EN LA PRIMERA MITAD DEL SIGLO XX

En el libro de Alberto Guerra Trigueros publicado en 1963, sus poemas tratan temática de tipo existencial dónde el autor reflexiona en sí mismo, en Dios y se puede notar una preocupación ante la soledad, la muerte entre otros. Gallegos (2005, p. 188) dice que “la muerte aparece en su horizonte mental y psíquico, y, con ella, su intenso preguntarse por el hombre que es, ese Alberto Guerra-Trigueros”. 

Para analizar el existencialismo presente en la poesía de  Guerra Trigueros se puede iniciar con el poema que da el título al libro, es decir con  “Poema Póstumo” el cual está conformado por 28 poemas. En el primer grupo de estos poemas es que se puede observar con más claridad la temática existencialista del escritor.

En los capítulos anteriores se ha hablado de los diferentes enfoques existencialistas, en esta ocasión al analizar el Poema Póstumo de Guerra trigueros se ve una marcada influencia  del enfoque existencialista del humanismo (ateísta) ya que el escritor declara lo siguiente en el poema:

Y todos los hombres

Somos hombres póstumos.

Porque no hemos de vivir

(Si es que vivimos)

Sino hasta después

De muertos:

Cuando no damos cuenta

(Si es que nos damos cuenta)

De que estamos muertos;

Estos de somos

Hombres;

Hombres Póstumos:

vale decir,

Dioses Póstumos.

Porque Dios mismo,

si es que de veras

Dios,

Debe, como el hombre,

Por lo menos darse cuenta

de su muerte.

Dios debe ser una especie

de gigantesco

cadáver

consciente

De este fragmento se puede notar el claro enfoque existencialista humanista de Jean Paul Sartre con las tres regiones del ser. Por ejemplo cuando en el verso el escritor afirma /Porque no hemos de vivir//(si es que vivimos)//Sino hasta después//De muertos://Cuando no damos cuenta//(si es que nos damos cuenta)// hace referencia al despertar de la conciencia que se puede alcanzar en la región del ser para sí donde el hombre ya alcanza el nivel trascendencia ya que si no lo tiene permanece en el primer nivel del ser en sí.

En la segunda estrofa que se ha seleccionado también se puede ver una referencia clara a la influencia de Jean Paul Sartre con el primer nivel de ser, ósea el ser en sí ya que Sartre afirmaba que la idea de Dios no podía ser ya que este no cabía como un ser para sí, ósea un ser consciente y que sí era Dios debía estar en el primer nivel del ser en sí donde la trascendencia no se ejecuta sino  que el escritor viene y afirma que Dios mismo//. Si es que de veras es Dios// debe, como el hombre //por lo menos darse cuenta// de su muerte//Dios mismo// debe de ser una especie// de gigantesco cadáver consciente//.

Otro poema dónde también se nota características existencialistas es el “Seudo- Romance del Poeta Menos”. Este poema trata de como se ve Alberto así mismo en y que no hay nada que le salve de la muerte ya que esta alcanza a todos los hombres,  además se lamenta que su existencia no ha dejado un legado que perdure por muchos años.

Vida o Muerte, ese Buitre eterno

que nos empieza a devorar

desde el instante en que nacemos

---vida mortal, muerte viva---,

Misterio para el gran Misterio,

Dolor para el Dolor final.

Tristes atletas que debemos,

Muriendo cada día más,

Adiestrarnos para el postrero

Morir, seguros de acertar!

En este párrafo reflexiona sobre la finitud de la vida y como la muerte espera a que las personas lleguen a ese estado. Con relación al existencialismo la característica que presenta esa agonía de la vida ya que no encuentra una salida ante la muerte y como se planteó en el existencialismo metafísico expuesto anteriormente.

  En el siguiente fragmento el escritor en el mismo poema hace referencia a que nada de lo que hagamos será eterno ya que esos hechos no trascienden dejando claro su posición de lo que es y aún no ha podido transformar:

¡Quién pudiera dejar un verso

Verdaderamente inmortal!

¡Quién pudiera dejar un verso

Como un faro encima del mar!

Quién pudiera dejar un verso…

Pero yo nada espero ya.

Sólo pido--- la vida es sueño---

Dormir bien mi sueño mortal,

Sin los insmonios que yo “duermo”

En espera de un Despertar.

Un tercera muestra de la temática existencialista que presentan los  poemas de Guerra Trigueros es el poema  “Creo en Ti”, en el cuál el escrito reafirma su posición cristiana y la fe hacia Dios afirmando que en su existencia está presente el sacrificio de Jesús.

Hijo del hombre, Hijo de Dios: qué importa el nombre

En que yo crea, Cristo, si está en mi tú vida;

Sí en mi vive tu muerte y sangra en mí tu herida,

Hijo de Dios, hijo del hombre?

Otros autores con poemas con temáticas existencialistas

Además de Guerra Trigueros, otros poetas realizaron poemas con temáticas existencialistas entre los cuales se encuentra Oswaldo Escobar Velado. La mayor parte de la producción literaria estuvo dirigida hacia temáticas criticas pero en el último de sus poemarios estando cerca de la muerte escribiría poemas reflexionando de lo que había sido su vida. Sobre  esto habla Ítalo López Vallecillos en el prólogo del poemario póstumo de Escobar Velado “el dolo del hombre de carne y hueso, su angustia existencial, su miseria cotidiana, la opresión en que transcurren sus días se reflejan en poemas de firme contexto  y onda emoción.

La muestra poética de escobar velado es el poema Elegía infinita en el que Escobar expone su sentimiento de dolor, angustia y soledad por la muerte de su madre y que lo único que le impulsa a seguir es el país,  ya que no le ve sentido a lo que lo demás que le rodea.

No tengo a nadie

Que comparta conmigo

La mesa de mi angustia; mi rodaja

De luna que en mis sueños

Había; ardo en mi soledad

Como una lámpara; lloro

Como el viento llora

Pasando entre los árboles;

Soy un mar asombrado que robado sus espejos; todo lo que quería

Se perdió para siempre; de que sirven

Los cuadros familiares; de que el negrito

Alegre comiendo su sandía; de que la orquídea

Sin tu mano pura y de qué mi cigarrillo

Inseparable si su ceniza

Permanece muda; de qué mi llanto al fin

Si no tengo pañuelos; de que mi novia en junio

Si yo muero en mayo; de que la vida

Sin un muro alegre de violetas;

Sin tu sonrisa iluminando todos

Los senderos del mundo

            Otro escritor salvadoreño que en alguno de sus poemas escribió temáticas de tipo existencialista es Pedro Geoffoy Rivas. En su poemas vida, muerte y pasión del anti hombre el escritor s analiza así mismo del cambio de conciencia que tuvo.

Ah mi vida antes de sin mayor objeto

Que cantar, cantar, cantar,

Como cualquier canario de solterona beata

Ah, mis veinticinco años tirados a la calle.

Veinticinco años que a nadie le sirvieron de nada.

Pobrecito poeta que era yo, burgués y bueno.

Espermatozoide de abogado con clientela.

Oruga de terratenientes con grandes cafetales y millares de esclavos

Embrión de gran señor, violador de mengalas y de morenas siervas campesinas.

En este fragmento el autor al revisar su vida cobra conciencia de lo que era y es para la transformación de su vida y así trascender su existencia. En la parte final del poema ya hace una reflexión sobre su nueva visión de vida. Este es un claro ejemplo de lo propuesto por Heidegger como lo vimos en el enfoque metafísico capítulos atrás con respeto al Desein (el ser en el mundo).